En el corazón vibrante del Gold Tower Hotel de Nápoles, la luz no solo ilumina: modela el espacio, define la atmósfera y revela una identidad. Así nace Gold Wave, una composición luminosa hecha a medida con los dispositivos Egokube, concebida como una ola suspendida que recorre el vestíbulo con elegancia, energía y carácter.
Una creación que convierte la luz en experiencia
Gold Wave es el resultado de la colaboración entre officinadiarchitettura&design y Egoluce, un diálogo creativo que ha dado vida a una suspensión capaz de unir tecnología, artesanía y visión arquitectónica. El objetivo no era simplemente iluminar, sino crear una experiencia: una presencia escenográfica que recibe al huésped, guía la mirada y transforma el vestíbulo en un lugar especial desde el primer paso.
La forma de la ola, el alma del lugar
La inspiración nace del mar, un símbolo profundo y esencial de la cultura napolitana. La línea fluida y envolvente de la suspensión evoca el ritmo del agua, mientras que el diálogo entre las superficies doradas y negras crea un equilibrio refinado entre luz y sombra, calidez y profundidad. El resultado es un gesto luminoso dinámico que cambia con los reflejos, las perspectivas y los movimientos de los visitantes.
Gold Wave se convierte en una expresión de elegancia contemporánea, identidad mediterránea y una marcada sensibilidad escenográfica.
Tecnología Egoluce: esencialidad y libertad compositiva
Gold Wave toma forma gracias a los dispositivos Egokube, elementos de techo de diseño esencial que actúan como verdaderos módulos arquitectónicos. Fabricados en aluminio y sin tornillos visibles, ofrecen una presencia limpia y precisa, ideal para composiciones dinámicas y fluidas.
La fuente GU10, alimentada directamente a la red, garantiza facilidad de instalación y gran flexibilidad en la elección de la luz. Las múltiples terminaciones, como blanco, negro, arena y las versiones en pan de oro o cobre, permiten definir atmósferas específicas e identidades visuales refinadas.
En Gold Wave, Egokube se convierte en un elemento rítmico que construye el movimiento de la ola y transforma la luz en un gesto arquitectónico continuo y reconocible.
El símbolo de la acogida
Entrar en el vestíbulo del Gold Tower Hotel significa ser envuelto por una presencia luminosa que define inmediatamente el tono de la experiencia: lujo contemporáneo, energía, refinamiento y una profunda conexión con el entorno. Los reflejos dorados crean una atmósfera equilibrada y sofisticada, donde la arquitectura, el arte y la hospitalidad dialogan en perfecta armonía. Gold Wave no es solo un elemento decorativo: es un símbolo de identidad, una luz que expresa el carácter del hotel y su capacidad para transformar un espacio de paso en una experiencia memorable.